Frank comenzó explicando que una canción se divide entre los autores (quienes crean el tema), los productores (quienes lo producen) y los intérpretes o ejecutantes (aquellos que “ejecutan” el tema, ya sean músicos, cantantes...)
Así mismo, el ponente expuso que los temas a partir de 50 años de existencia pierden el dueño, por lo que pueden versionarse. Por lo tanto, ¿qué se debe hacer para pedir una licencia? En el mundo house, la gente se cree que al hacer una versión de una canción antigua ya no hace falta pedir derechos de autor, pero no es así. Se deben pedir derechos a la editorial original del tema. En el caso del cover es distinto, ya que no es necesario pedir permiso, porque en principio, la canción original no varía.
Frank explicó que la editorial gestiona las canciones, por lo tanto, cuando un artista quiere sacar un disco puede acudir a una editorial y de todas las canciones que allí le enseñen, puede escoger las que quiera, pagándole a la editorial un 50%.
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